A 100 años de la llegada del automóvil, uno pensaría que debe estar resuelto el tema de los siniestros viales. En 100 años llevamos cientos de millones de fallecidos, causados directa o indirectamente por vehículos a motor.
Ya no podemos hablar de accidentes. Son atropellos, choques, colisiones, siniestros, homicidios culposos, negligencia. Un accidente es un hecho fortuito, impredecible e inevitable, y ya nosotros sabemos exactamente cómo se evitan los siniestros viales pero ELEGIMOS HACERNOS LOS PENDEJOS y microanalizar los hechos para señalar "responsables" basándonos en leyes de tránsito hechas a la medida de fabricantes de autos y su negocio.
Opino que ningún usuario vulnerable de las vías debe recibir culpa o responsabilidad al ser atropellado. Los automóviles son misiles con ruedas, guiados por humanos que se equivocan. Objetivamente todo el peligro de lesiones o muerte lo trae el automóvil a cualquier escena, mientras más grande y pesado mayor es el peligro. Los autos son los últimos en llegar al espacio humano, ¿por qué merecen toda esta consideración por encima de los usuarios originales del espacio público?